29.9.12

Cuando los Estados se rinden

El endeudamiento generalizado es el producto del neoliberalismo: las familias se endeudan debido a la reducción del poder adquisitivo, los bancos se endeudan por aprovechar las oportunidades de la desregulación, los Estados se endeudan por haber abandonado parte de los ingresos fiscales en aplicación del  dogma de la reducción de impuestos a los más ricos. Con la crisis de la deuda, los Estados se encuentran sometidos a unas condiciones financieras difíciles. Los mercados ponen en duda la capacidad de los Estados para reembolsar sus deudas y las agencias de notación (todas anglo-sajonas) les castigan. Estas dudas del mercado penalizan más las deudas a largo plazo con la acumulación de estos intereses y pueden asfixiar a un Estado ya anoréxico por sus recortes.
El sistema político-financiero europeo está poniendo en marcha una nueva estructuración de las instituciones por medio de un nuevo tratado. Se trata de una Unión financiera bajo la supervisión del Banco Central Europeo que da a éste un amplio papel estratégico en cuanto al funcionamiento de los Estados miembros de la zona Euro. Estos se encuentran en una relación de dependencia del sistema financiero,  fortalecida por este nuevo Tratado. Tanto los presupuestos –fundamento de la relación entre ciudadanos y su representación parlamentaria – como la economía–fundamento del tejido social –  se vuelven rehenes de las decisiones de personas que no han sido elegidas por los ciudadanos europeos. Esta publicación intenta dar algunas informaciones sobre el funcionamiento de los mecanismos previstos por este Tratado.
 
MEDE-Mecanismo Europeo De Estabilidad
Para defender la moneda y responder a las dificultades de los Estados endeudados, la  estructura programada por el Eurogrupo (17 miembros) y que funciona actualmente es la siguiente:

1)- se han improvisado con urgencia  dos mecanismos para que vuelva la confianza en los inversores y bajen las primas de riesgo (con poco éxito). Se trata de: 

FEDEF, fondo europeo de estabilidad financiera que ofrece garantías a este tipo de financiación de los Estados. 
MEDEF, Mecanismo europeo de estabilidad financiera que permite desbloquear las ayudas con más rapidez.
 
2)- Ahora, el Eurogrupo de la Unión Europea añade un mecanismo que reúne las funciones de los dos anteriores dentro de una entidad única dotada de una jurisdicción apropiada.  Se trata de MEDE, Mecanismo europeo de Estabilidad.  Este nuevo dispositivo debe ponerse en marcha al principio del año 2013 – después de la ratificación del Tratado de estabilidad y gobernanza por los países miembros–.
MEDE está previsto para ser alimentado por los países miembros en función de sus PIB y demografía correspondientes  y dotado de un capital propio de 700 mil millones de euros. Este fondo puede ser revisado y se divide en dos partes:
-un capital "liberable" total de 80 mil millones  que los estados deben alimentar por paquetes de 20% repartidos en 5 años.
-un capital de socorro de 620 mil millones  que los Estados se comprometen  a alimentar cuando el primero está agotado.
MEDE puede abrirse a los  mercados para aumentar su fondo con una tasa de intereses que se espera razonable. Puede prestar a los Estados y a sus Bancos directamente. El hecho de poder comprar los bonos de los Estados que no llegan a venderlos en los mercados hace bajar automáticamente las tasas de interés.
MEDE se apoya sobre el consejo de gobernadores, compuesto por los ministros de finanzas de los Estados miembros y presidido por el jefe del Eurogrupo.
Críticas: la gobernanza del MEDE es objeto de numerosas críticas. El hecho  de que cada gobernador tenga un número de votos proporcional a su cotización y que las decisiones se tomen por mayoría cualificada de 85% tiene por consecuencia que sólo Alemania, Francia y Italia tienen derecho de veto. Cada intervención del MEDE está sometida a ciertas condiciones. Los países beneficiarios tienen que comprometerse con unas reformas dictadas por la Comisión Europea, la BCE y el FMI que financia en parte el fondo. Estas condiciones van en contra de las  soberanías nacionales y también pueden prolongar la austeridad, la recesión  y el paro generados por una crisis, como es el caso actualmente.
TECG- Tratado de estabilidad, coordinación y gobernanza
La puesta en marcha del dispositivo descrito necesita la ratificación del Tratado TECG. Este texto da una idea de la política actual de Europa y de lo que decide en nombre de los ciudadanos europeos a través de sus Parlamentos o por referéndum. A no ser que, como fue el caso con el Tratado de Lisboa que había avalado los términos de una Constitución rechazada en referéndum por Francia y Holanda, lo firmen directamente los jefes de gobierno.  Este texto explicita particularmente las condiciones para recurrir al MEDE:
-recuerda « la necesidad de incitar y, si necesario, obligar a los Estados miembros que tienen un déficit excesivo a ampliar sus reformas estructurales y sus recortes»
-los países miembros firmantes se comprometen    « a apoyar las proposiciones o recomendaciones de la Comisión Europea cuando ésta considere que un estado miembro no respeta el criterio de déficit». 
Cuando una parte firmante estima que otra parte firmante no ha respetado el criterio de déficit, puede apelar a la Corte de justicia, cualquiera que sea el informe de la Comisión»; si la otra parte no se conforma con la decisión de la Corte, « la parte demandante puede pedir sanciones financieras». Se confirma la DesUnión Europea. 
A estas críticas se añade la que concierne al banco central europeo.
BCE-Banco Central Europeo
El dispositivo MEDE consagrado por el Tratado TECG es un proyecto de Unión Bancaria Europea que hace del BCE el supervisor de unos 6000 bancos europeos. Los tratados actuales limitaban su papel a la prevención de la inflación y de las tasas de interés. Que un Banco Central sea el supervisor del sistema bancario es el caso de otros países, como la FED en los EEUU de América. Pero Europa no es un sólo país. Su nueva función de supervisor de bancos se añade a la ayuda a los países endeudados con compra de bonos y préstamos a medio plazo dirigidos a los bancos de estos países. 
No hay elección entre proteger los derechos de los acreedores y el mercado,  lo que lleva a más austeridad o… la ruina de los acreedores de una manera u otra por voluntad de los ciudadanos europeos.
Los que nos gobiernan han elegido rendirse ante los acreedores. Nos precipitan hacia la depresión con un modelo de dictadura financiera consagrada por unas normas jurídicas casi constitucionales cuando se trata de un simple principio de política económica.  Demuestran así que se ponen al servicio de la renta financiera y delegan sus poderes a una institución. esta concentración de poderes en manos de una institución plantea un problema político: el dispositivo previsto de Unión Bancaria es una bofetada a la democracia.
 
Nota:
Para conseguir los fondos necesarios para la financiación de sus economías, los Estados tienen que pedir dinero con intereses elevados –es un cinismo llamarl a estos intereses  "primas de riesgo" concepto que presenta al mercado como víctima posible y no como el verdugo que acaba siendo en tiempos revueltos –.-